AL VELADOR

Me encantan estos días, con este tiempo tan cambiante y tan juguetón, que todos pensábamos ya en abandonar las chaquetas y ala que llega el fresquito, "es lo que tiene el cambio climático".
Cuando todos estabamos ya pendientes de sacar la ropa de verano, los pantalones cortos, los piratas, los shorts, las camisetas de tirantes, las minifaldas..... Cuando la depilación total pasa a ser parte de nuestra vida, las cremas bronceadoras, que te dejan unos ronchos en las manos que parece que no te lavas, ahora que piensas que es el momento de dejar ver lo justo, los tatuajes de ellos que dicen "mira que malote soy", los piercing de ellas en los ombligos, la ropa fresquita sugerente, dejando entrever las virtudes del cuerpo, llegan los pantalones caídos para que podamos leer Calvin Klein, o ver ese tanga que esta sufriendo como el Cristo crucificado, la tensión que soporta hace pensar que esta construido en kevlar, llega el momento que todos esperábamos "EL MOMENTO VELADOR" si es que en Huesca somos así, un rayo de sol y alaaaaaaaaaaaaaaaaaaa todos al velador, los porches, el mibar, la botánica, el café del arte, el kafka, todo es alegría.
Por eso me gustan estos días, sales de casa con la ilusión de tomarte algo en un velador y toma cierzo del Moncayo, bajan las temperaturas y se te ponen los pezones como escarpias, como para cortar cristal, pero es igual, tu has salido con la intención de estar en un velador y ver pasar a la gente, aunque te tengas que tomar un café con leche y lleves la chaqueta abrochada como si fueses casta y pura, tu al velador, por que para eso lo han puesto.